Al pensar en el concepto DINNER SHOW, no se muy bien por qué, pero me viene a la cabeza la palabra MARIDAJE. Supongo porque considero que un Dinner Show (cena-espectáculo en español) no es una secuencia cronológica donde primero se sirve la cena y luego tiene lugar una atracción artística, sino que más bien se trata de una fusión en la que gastronomía&show se integran perdiéndose en los límites uno del otro.
Yo diría que se trata de una cena teatralizada o de un teatro con cena, de manera que la cena se convierte en una experiencia artística y el show se transforma en una experiencia sensorial-gustativa. Fusionando {show&cena}, las sensaciones llegan al invitado por los 3 principales canales de percepción: el auditivo, el visual y el cinestésico. El resultado es una experiencia original, nueva, diferente y muy sensorial.
En el siguiente vídeo os muestro un ejemplo de Dinner Show realizado en el hotel Peñiscola Plaza Suites (4*) con motivo de San Valentín.
¿Quieres conocer paso a paso como lo organizó Alade3?
1.- En primer lugar los animadores turísticos de Alade3 ambientaron y decoraron la sala con corazones, cupidos y demás alegorías relacionadas con el Amor. La sala perdió su estética tradicional y se convirtió en un salón con destellos en rosa-rojo que invitaban a la inmersión total en la temática de San Valentín.
2.- La minuta también se personalizó con un diseño en concordancia con los colores y estética utilizados en la decoración.
3.- El menú destacó la riqueza de la cocina mediterránea dando especial protagonismo a las verduras de la zona, los pescados y el marisco. A los platos se les dio un toque de nouvelle cuisine, para convertir la cena en una experiencia gastronómica de nivel.
4.- La bienvenida de los invitados corrió a cargo de las artistas de la velada, dos famosas y extraordinariamente bien vestidas Drag Queens. Las drag queens actuaron como anfitrionas dando la bienvenida en la puerta del salón a los invitados que quedaban literalmente sorprendidos y shockeados por el look glamuroso y chic de las divas.
Posteriormente se les invitaba a posar en un Photo Call Interactivo con atrezzo de San Valentín. Los invitados podían elegir entre distintos vestuarios y complementos como alas de Cupido, caraj y flechas, gafas con corazones…. Y componer entre ellos y las drags una escena divertida que quedaría recogido en sus cámaras de foto y vídeo.
Una vez todos los invitados se encontraron dentro el salón, las Drags pasearon por las mesas comprobando que todo el mundo estaba perfectamente acomodado y a gusto.
5.- La cena dio comienzo con un desfile entre las Drag Queens y los camareros. El resto de la cena fue una alternancia ordenada entre performance, animación de music hall, play backs y servicio de cena. M
e gustaría detenerme un momento en este punto de crucial importancia: los camareros y los artistas deben comprender a la perfección este maridaje y no deben molestarse sino al contrario trabajar en equipo. Nosotros sugerimos que las actuaciones tengan lugar al principio y final de la cena y en los cambios de plato, dejando también tiempo para que el invitado disfrute de la gastronomía y de la conversación.
En el caso del hotel Peñiscola Plaza Suites se trataba de una cena a 4 tiempos compuesta por una crema, un plato de pescado, uno de carne y el postre. Las artistas realizaron en total 4 actuaciones con sus respectivos cambios de vestuario; el orden fue el siguiente: apertura de la cena, cambio del pescado a la carne, cambio de la carne al postre, última entrada en los cafés y las copas.
6.-Como final de fiesta, las drags volvieron a recorrer todas las mesas, para despedirse personalmente de los invitados y permitir que se hicieran fotos con ellas y el último vestuario utilizado.
El resultado fue un alto grado de satisfacción de los comensales quienes en las encuestas de calidad manifestaron su deseo de repetir la experiencia. No puedo terminar este post sin aclarar que un show de Drag Queens no tiene que ser en ningún caso obsceno ni excesivamente subido de tono.
El secreto del éxito reside en la elección de artistas con un vestuario de alta gama y con tablas suficientes para combinar la improvisación, la broma insinuante al más puro estilo music hall, con la gracia y la habilidad artística a la hora de interpretar los play backs.
Creemos que los DINNER SHOWS, tan utilizados por otra parte en EEUU, se pueden importar e implantar perfectamente en los programas de animación turística de los hoteles de nuestro país.
